Mírame ahora

Me entregaron esta muñeca sin saber su nombre. El único dato era que pertenecía a la marca Famosa, ya que en el cuello tiene el logotipo de esta empresa juguetera. Sus clarísimos ojos margarita destacaban en esa carita tan oscura. Había perdido el relleno casi por completo. La goma espuma se había convertido en polvo y solo quedaba la lana. Dentro tenía una estructura de plástico, pero en ese momento desconocía su función. Imaginaba que servía para mantener la postura de los brazos y evitar que se fueran hacia atrás. El cuerpo presentaba zonas descosidas pero la tela se mantenía en buen estado. Los ojos presentaban también una particularidad: sus pestañas eran rígidas, de una sola pieza en goma o caucho. Pero aunque sus ojos eran durmientes habían perdido su movimiento. Después de restaurada, y con su ropa original en un estado excelente, tuve el placer de conocer una muñeca peculiar y muy bonita, de la que sólo me quedaba conocer su nombre. Miren (Tutu), un

En los años 80 se popularizaron los muñecos bebé de gran tamaño, de cuerpo blandito y extremidades de goma. Una de sus características es que podían ser vestidos como niños o niñas utilizando ropa real de entre 3 y 6 meses lo que para muchos adultos supuso la oportunidad de disponer de una referencia sobre la que diseñar y crear auténticos jerseys, pantalones, vestidos y otras prendas de vestir. Uno de los más conocidos fue Mi Nene de la marca Berjusa, que además de los dos sexos comercializó muñecos de diferentes razas. En ocasiones incluían mecanismos de lloro, que interrumpían al darles el biberón o ponerles el chupete lo que contribuía a darles un mayor realismo, pero sus caritas son de muñeco sin pretender en ningún momento imitar a bebés reales como sucede con los reborn. No sé cual es el nombre de esta muñeca. Sólo presenta una marca en el cuello donde figura ESVI, marca juguetera española con creaciones mecánicas muy populares como Nicasia, la muñeca que cose,